Cada una de las entregas del Perfil Ambiental ha proveído una lectura actualizada de eventos clave, relativos a la situación del ambiente natural de Guatemala y ha analizado también sus causas y consecuencias. Las bases de datos construidas durante este periodo, relativamente largo, nos han permitido analizar y explicar tendencias de un conjunto de indicadores vinculados a los principales componentes del ambiente natural y a las relaciones entre este y las dinámicas económicas, sociales y político-institucionales.
Durante esta década de trabajo, el proceso de producción del Perfil Ambiental de Guatemala ha estado marcado por los siguientes propósitos: (i) Medir, analizar, interpretar y comunicar el estado de situación de los elementos del subsistema natural y las interacciones reciprocas con los subsistemas económico, social y político-institucional; (ii) Analizar las principales tendencias en torno a los indicadores-señal utilizados y brindar elementos de juicio que permitan anticipar acciones institucionales para prevenir mayores niveles de riesgo en la búsqueda del bienestar humano; (iii) Recomendar acciones de política pública, pautas de relacionamiento privado con el entorno natural así como acciones ciudadanas que conduzcan al resguardo, recuperación, mejora, defensa y uso apropiado de los bienes y servicios del subsistema natural de Guatemala y; (iv) Estimular la adopción de acciones territoriales con la escala, continuidad y esfuerzo humano, financiero y físico acorde a la dimensión, profundidad y complejidad de los problemas y crisis ambientales que afectan de manera sistemática la vida ordinaria de todos los guatemaltecos, principalmente los más pobres.
Estos propósitos se han fortalecido sistemáticamente y han permitido generar una corriente de reflexión y acciones en torno del valor estratégico de los bienes y servicios del ambiente natural. Sin embargo, múltiples hechos nos siguen mostrando que esta corriente aun no es suficiente para revertir o al menos estabilizar las trayectorias de agotamiento, deterioro y contaminación a las que están expuestos los componentes vitales de nuestro ambiente natural.
Esta realidad resulta tan desalentadora como desafiante pues en un país como el nuestro, con una vulnerabilidad sistémica de gran profundidad y que resulta sumamente pesada para todos pero particularmente para el 74.8% de la población rural que se enfrenta cotidianamente a la pobreza, la degradación ambiental equivale a un verdadero tiro de gracia. Como agravante a esta realidad local, nuestra sociedad ya se enfrenta, a lo largo y ancho del territorio, a condiciones de vida más hostiles, derivadas del cambio global del clima.
Debemos advertir, que a los largo de estos diez años de observación del ambiente natural y sus relaciones recíprocas con la sociedad en su sentido más amplio, prácticamente la totalidad de los indicadores analizados reflejan un continuo y cada vez más profundo deterioro. Más grave aún resulta advertir que durante este tiempo, las instituciones ambientales han decaído en importancia relativa dentro del aparato estatal, se ven cada vez más pequeñas frente a la envergadura de las crisis ambientales, se mantiene una peligrosa apatía política frente a las necesidades de revalorizar el ambiente natural y asumir con seriedad la gestión ambiental al tiempo que se insiste, desde estas esferas, por la profundización de los esquemas de extracción de bienes naturales en marcos que solo nos garantizan más miseria. Estas circunstancias también son fuentes que exacerban las crisis sociales, particularmente cuando se violentan los derechos de los pueblos a decidir sobre el uso y el futuro de los territorios que habitan.
Por medio de esta próxima entrega, mantenemos viva la esperanza de que se eleve el nivel de entendimiento e interés individual y colectivo acerca de la necesidad de cambiar la valoración de nuestro ambiente natural y consecuentemente la acción, para evitar que unos pocos, aferrados a intereses economicistas de corto plazo, socaven la base sobre la cual se sustenta el bienestar de todos, en el largo plazo.