Muerte se escribe con Z (2 de 2)

¿Qué caracteriza a las organizaciones criminales más poderosas a nivel mundial? ¿Su capacidad para hacer ganancias? Según el periodista Roberto Saviano (autor de libro Gomorra) 60% del PIB italiano está conectado con actividades relacionada a los clanes de la Camorra napolitana. De este 60% de PIB, más de la mitad está conectada en exportaciones a toda la Unión Europea.

En Manhattan, el mercado inmobiliario debe de pagar un costo extra en todo proceso de construcción conocido como el “mob tax” (impuesto de la mafia) debido al control de los sindicatos de construcción y empresas de cemento por parte de las 5 familias mafiosas italo-americanas. ¿Qué más caracteriza al crimen organizado transnacional? ¿Su poder de ejercer violencia? En efecto. Durante la década de los ochenta, la guerra anti-mafia en Italia llevada heróicamente por los jueces Falcone y Borsellino significó más de 10,000 muertos en un período de 10 años.

En Manhattan, el mercado inmobiliario debe de pagar un costo extra en todo proceso de construcción conocido como el “mob tax” (impuesto de la mafia) debido al control de los sindicatos de construcción y empresas de cemento por parte de las 5 familias mafiosas italo-americanas. ¿Qué más caracteriza al crimen organizado transnacional? ¿Su poder de ejercer violencia? En efecto. Durante la década de los ochenta, la guerra anti-mafia en Italia llevada heróicamente por los jueces Falcone y Borsellino significó más de 10,000 muertos en un período de 10 años.

Sin embargo, lo que más caracteriza a las organizaciones exitosas del crimen organizado es la supervivencia en el tiempo de sus ritos de pasaje. Este elemento del ritual es lo que les hace distinto de cualquier otra organización. Mi tesis es la siguiente: A mayor complejidad del ritual de pasaje, mayor complejidad en la identidad de grupo, ya sea en una sociedad secreta tradicional como la francmasonería o en sociedades secretas criminales como la Cosa Nostra o la Camorra. Esta últimas dos tienen una simbología ligada a la sangre en sus simbolismos concretos de iniciación para hacerle saber al nuevo iniciado su pertenencia al grupo (no en vano la idea de familia o clan) .

En el mundo del narcotráfico mexicano (hablando en general de los 7 carteles actuales) cada vez se observa la existencia de altares dedicados a la Santa Muerte ( una sincronía de ritos aztecas antiguos y ritos católicos donde se venera la figura de la muerte); se han encontrado medallones, cadenas, amuletos, etc.. en portación de miembros de cárteles con la figura de la Santa Muerte.

Pero lo más reciente fue el decomiso por parte del ejército mexicano de un medallón de oro puro con una Z grabada. Este medallón estaba en portación de un sicario batido en un enfrentamiento con fuerzas militares. Se asume, esta pieza servía como elemento de identificación. Abundan los videos donde individuos que presuntamente pertenecen a los Zetas muestras partes del cuerpo tatuadas con una Z; y además, es sabido que en la nomenclatura del grupo, cada miembro tiene un nombre, que inicia con la letra zeta -e inmediatamente después un número: entre más pequeño sea el numeral, el miembro muestra su pertenencia al grupo original y su jerarquía es mayor. Puede pensarse que el futuro miembro debe de probar su valía asesinando a rivales; situación que es común en la Camorra napolitana.

En realidad mucho hemos hablado sobre los hechos concretos y particulares producidos en el terreno por el Crimen Organizado que tipificamos de mafia. Pero poco hemos hablado sobre el verdadero problema medular: La mafia, donde quiera que surja, es un reflejo de nuestras apetencias, de nuestros deseos más oscuros y de nuestra tendencia a expresar la pulsión del destrudo jugando a ser dioses. Más que ser un problema de seguridad, es un problema de la naturaleza humana. Explorar a la mafia es explorar la naturaleza humana, es un viaje ida y vuelta a las profundidades del sol; es, cómo dicen los narco-corridos, un palenque con mismito demonio. No sólo es una guerra de balas, es una guerra para ganar los corazones de los hombres. Se trata de la antigua guerra entre el bien y el mal, la primera guerra entre Luzbel y Miguel, la guerra entre ¨ellos¨ y ¨nosotros¨.

El combate a esta hidra de mil cabezas del narcotráfico sólo puede pelearse con voluntades y corazones dispuestos a no voltear la cara frente al acto del mal.

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