El anuncio dado por la administración del Presidente Barack Obama deja la puerta abierta a este beneficio e insisto en decirle a la juventud que mientras la puerta esté abierta hay que entrar. Aprovechen esta coyuntura política. Recordemos que es año electoral en Estados Unidos y esta medida pudiera revertirse después de las elecciones o en cualquier momento determinado.
Guatemala se beneficia económicamente con esta medida porque con el hecho de tener un permiso de trabajo, este es más estable, mejor remunerado, se adquirirían ingresos extras a la hora de hacer la declaración de los impuestos al Servicio de Rentas Internas (IRS, por sus siglas en inglés) ya que tendrían derecho a acceder al Crédito de Ingreso del Trabajo (EIC, por sus siglas en inglés), el cual se obtiene de una combinación del ingreso anual y del número de dependientes menores de 17 años que están a cargo del matrimonio o del jefe de familia y que cumplan también con el requisito de tener un número de seguro social válido para trabajar. Estos dependientes pudieran ser hijos, hermanos, sobrinos e incluso primos que viven bajo el mismo techo.
Derivado de esta medida migratoria como incidencia favorable a la economía guatemalteca, que el año 2012 recibió $4,378.1 millones por concepto de remesas familiares y que al mes de mayo de 2,012 el monto alcanza los $1,928.1 millones, según cifras oficiales del Banco de Guatemala, habría un incremento del monto de divisas enviado por los migrantes hacia el país tomando en cuenta la estabilidad laboral así como los incentivos fiscales antes mencionados.
Entonces, si consideramos que en los últimos años el migrante guatemalteco es el principal inversionista del país, el gobierno de Guatemala está obligado a atraer y crear políticas para el mejor aprovechamiento de esta inversión extranjera que si no es directa, en gran parte es porque no se ha creado la infraestructura adecuada para que lo sea. Dentro de esta infraestructura está la de saber cuidar la materia prima, la fuente que origina este flujo de divisas al país, que son los migrantes.
Si uno de los requisitos para beneficiarse de este programa es que tengan estudios en Estados Unidos, entonces por favor hay que ayudarlos a que obtengan el Bachillerato por Madurez, (GED por sus siglas en inglés) o simplemente estimular un deseo a la educación en cualquier nivel. Si aproximadamente el 60% de los migrantes de Guatemala son indígenas, que por sus condiciones socieconómicas se vieron obligados a ir a “trabajar” y no a estudiar, y obviamente no han tenido acceso a la educación, entonces por qué no crear información o programas que les ayuden a obtener ese Bachillerato por Madurez en Estados Unidos, que incluso se puede obtener en idioma español. Por lo anteriormente expuesto es una obligación moral del gobierno de Guatemala brindar todas las facilidades para que los connacionales que viven en las tierras del tío Sam y que califiquen para el programa anunciado por el Presidente Barack Obama, a través de la Secretaria del Departamento de Seguridad Interna, Janet Napolitano, puedan obtener el máximo beneficio, se inscriban e inicien su trámite hacia un futuro alentador. Por ello insisto mucho en afirmar que mientras la puerta esté abierta hay que entrar por ella. Un abrazo de solidaridad y esperanza a los refugiados. Bendiciones para Guatemala.