Comentario, Sr. Minondo Ayau

Bien lo han dicho muchos pensadores y humanistas, una sociedad se mide en relación al trato que se les da a sus mujeres: en la casa, en los espacios púbicos, en la política o la academia. ¡Lejos estamos, ciudadana, de ver hombres valientes cuestionando las injusticias que se dan en este país por ser mujer!

Lo que sí tenemos son prejuicios y argumentaciones simplonas de por qué hay mujeres asesinadas con saña. “Más chicas malas, más chicas muertas”, sentencia pública de alguien que no se preocupa por la raíz del problema y justifica la muerte y el asesinato de miles de mujeres por un supuesto de criminalidad. ¡Ahora si te matan y eres mujer, seguro eres criminal! Así es. Falta cuestionar en Guatemala las razones de “esas profesiones” ilegales y el incremento de mujeres involucradas en ellas, y que nos llevan a ser un país violento, como violenta es la desigualdad y la pobreza generada por una élite derechosa e incapaz de ver en el bien de todos su propio bien. Y como violento es un comentario como éste en un periódico nacional.

Caza de militares o militaricidio

¡Se cazan militares en Guatemala! Imagínese usted lector que mientras repasa estos comentarios se está buscando la verdad en la Sala de Vistas de una Corte Suprema de Justicia. Ya nadie recuerda en este país los beneficios de años y años de gobiernos militares. ¡Así se les paga hoy a los patriotas de alto nivel! Qué desconsideración. Muertes pero a cambio de orden, matanzas pero a cambio de seguridad.

Nunca se han respetado los Acuerdos de Paz como una agenda de país reformadora de un Estado corroído por muchos males; lo que sí, es que cuando se habla de saber la verdad y comenzar procesos legales en búsqueda de justicia, lo primero que se saca a colación son los olvidados Acuerdos de Paz. Mientras se le llama “caza de militares” por la derecha conservadora de este país, los oenegeros, los defensores de Derechos Humanos, jueces y tribunales hablan de Justicia. Al fin. Nada de militaricidio, que es absurdo, sino justicia que es necesaria.

Justicia “guerrillizada”

¡Cómo nos gusta eso de crear nuevos conceptos, dos o tres por columna de opinión! No se confunda ciudadano: la guerrilla sigue viva en Guatemala, y ha logrado entrar en los pasillos de Tribunales. Ahí van a parar sus impuestos: a una justicia aliada de una guerrilla todavía activa. ¿Cinismo? La Justicia actual en Guatemala está dando prueba –internacionalmente reconocida y aprobada– de procesos necesarios para un país y una sociedad diferente. La justicia es un valor democrático, constructor de dignidad. ¡Adelante Guatemala! 

scroll to top